
Pasión irlandesa de Antonin Artaud
por: Daniel AlcobaLa novela tiene 75 408 palabras. Narra el viaje y la campaña mágica de A. Artaud en Irlanda en 1937, y su catástrofe: regreso a Francia enchalecado en camisa de fuerza. La reclusión en hospitales psiquiátricos se prolonga hasta casi la muerte del poeta, el 4/03/1948.
La historia tiene cuatro narradores: 1) una “hija del alma” de Artaud, Séverine Cathin, poeta surrealista, ginecóloga y lesbiana; 2) el enano Zaqueo, personaje del Evangelio (Lucas, 19: 1-3), que es el OTRO alucinado que lo atormenta en sus delirios demoníacos; enemigo mortal; 3) el propio A. Artaud cuyas páginas apócrifas afloran en el texto; 4) y Kathy, editora del libro, “niña de luz” de concepción “milagrosa” (inseminación artificial avant la lettre) nacida el 1 de septiembre de 1939, es decir, el día en que comenzó la II Guerra Mundial.
El poeta y dramaturgo surrealista emprendió un viaje a la República de Irlanda en 1937 en cuyo transcurso se agravaría la psicosis que padecía. Nadie sabe lo ocurrido en aquella expedición. La historia que se cuenta aquí es imaginaria, aunque hay numerosos autores latinoamericanos y algunos franceses de carne y hueso entre sus personajes, que conviven con otros de pura invención poética y novelesca. Artaud estaba aquejado de teomanía (el cuadro clínico se caracteriza por tener el paciente trato con Dios, demonios diversos, la Virgen María…etc.), e interesado en la magia y el esoterismo de raíz judía (Cábala hebrea).
Entre los personajes no protagonistas hay un grupo de autores latinoamericanos: Alfonso Reyes, a la sazón embajador de México en Francia, César Vallejo, la esposa de éste Georgette, Miguel Ángel Asturias, Vicente Huidobro y su pareja Jimena Amunátegui, el “marqués de Lascanotegui, un hacendado argentino, diletante; el cubano Alejo Carpentier… todos contemporáneos y residentes parisinos en el período 1927 – 1938, que frecuentan a los franceses André Bretón, Robert Desnos, Ribement Dessaigne, Anaïs Nin, todos ellos colegas y amigos de A. Artaud.
Artaud viajó a México en 1935, en busca de “la última verdad”. No la encontró, por eso en 1937 fue a Irlanda a buscarla entre los celtas de la isla de Aran, guardianes del pasado ancestral. Llevaba el bastón «de trece nudos» que le regalara un amigo. A propósito de ese objeto, Artaud escribió entonces que procedía de la hija de un mago de Saboya mencionado en la profecía del santo patrón de los irlandeses, (san Patricio, Patrick, Paddy): «En Dublin no estaba solo a 1 contra 1000 (irlandeses fanáticos de Roma). Estaba solo pero con un bastón especial… que tiene 200 millones de fibras, y está incrustado de signos mágicos que representan las fuerzas morales y un simbolismo antenatal que por otra parte debe retomarse (…) Lo usé en Irlanda para imponer silencio a todos los que ladraban, y si me encarcelaron y deportaron fue porque yo mismo comprobé que como medio de defensa no servía para nada…».
Enorme decepción, porque era el báculo, cayado o vara mágica que usara en su momento san Patricio para expulsar las serpientes de la isla, vencer a un poderoso druida que podía volar igual que Simón Mago, el diabólico enemigo de san Pedro; derrotar dragones, convertir sus dedos santos en antorchas, hacer que el hielo ardiera, trasmutar la nieve en leche y mantequilla, protegerse de la lluvia y el frío, abrir agujeros en la tierra por donde escapaban las llamas del purgatorio y los ayes de los condenados… Sí, la expedición a Irlanda es quijotesca: pero el báculo o cayado de san Patricio era más poderoso que el yelmo de Mambrino, porque también lo había usado Cristo para derrotar al demonio en el desierto, e incluso había estado en las manos del propio Samael ¡Por algo tenía trece nudos y el signo del rayo en su madera! La segunda guerra mundial ya se insinúa en la violencia de la historia y en la malignidad de las pasiones.

- Inferno. Poéticas de la muerte, de Gilgamesh a Internet por: Daniel Alcoba 3.99€Añadir al carrito
Objeto constante de las religiones, la poesía y el arte de todos los tiempos, el infierno es más antiguo que los dioses, Dios, los ángeles y los demonios. Ha sido, sucesivamente, mundo de abajo o inferior, país o casa de Hades, Gehena… Se llama infierno a diversas poéticas de la muerte, otros tantos tapices de imágenes atroces que tejemos los vivos desde hace milenios. La iglesia de Roma o sus papas aseguraban que el infierno aguardaba las almas de los réprobos con todas las hornallas encendidas y el personal demoníaco completo, sartén en mano, hasta la llegada del papa Francesco, el argentino Jorge Mario Bergoglio, que declaró urbi et orbi que el infierno es un mito poético, un símbolo o metáfora del alma alejada de Dios, que es amor.
Este libro ofrece un catálogo muy amplio de paisajes de ultratumba, postrimerías de la vida o, para decirlo con mayor propiedad y precisión, de poéticas de la muerte. La imaginería del final de la vida a través del tiempo y las diversas religiones, con particular detención en las que más nos conciernen, las bíblicas o monoteístas e incluso las generadas por internet en las redes sociales.«El escritor Daniel Alcoba repasa en un ensayo el «origen y la historia del miedo al castigo eterno»».
El infierno como inspiración - Valorado en 4.00 de 5La raza asesina por: Jorge Domínguez 3.99€Añadir al carrito
A través de eones de tiempo universal, la humanidad ha aprendido a utilizar el 100% de la capacidad cerebral, con esto logró desarrollar una nueva sociedad conocida como Los Sistemas. También con ello aprendió a leer códigos genéticos de otras especies y a copiar sus funciones, expandiendo su tiempo de vida y viajando a cada rincón del Universo trasladando su energía, su aura. Los humanos implantan su información genética en primates de planetas en desarrollo, creando nuevas razas para integrarlas a los Sistemas, buscando generar un Universo estable, inherente a la inteligencia y la conciencia humanas. En uno de estos planetas en desarrollo, la nueva raza es portadora de un gen que amenaza su integración y tal vez incluso, amenaza a todos los humanos de los Sistemas.
- Valorado en 4.67 de 5Memorias del Internado por: Fernando Baena Suárez 3.99€Añadir al carrito
Un joven drogadicto es enviado a los Estados Unidos a un internado para su rehabilitación, donde sufre un proceso riguroso del cual no logrará salir bien librado debido, entre otras cosas, a las presiones de las directivas, quienes emplean métodos poco ortodoxos y muy extremos en su intento por modificar las vidas de los estudiantes. La obra es narrada en primera persona, un retrato intimista donde el personaje central se enfrenta tanto a sus fantasmas propios de su adicción a las drogas, como a un amor disfuncional e imposible. El personaje en cuestión, Agustín Cervantes, describe sus sentimientos, sus angustias, rodeado de unos personajes que afectan su frágil condición adictiva, quienes tendrán un final inesperado.
- Bistouri à l’âme poète (Pensées et poèmes) por: Jose Zanoni Yada 3.79€Añadir al carrito
Néanmoins, au delà des Histoires et des poèmes, il s’agit surtout des Réflexions sur l’art d’être médecin. Du livre original en espagnol. Maintenant, en français, nous allons découvrir la belle prose et la poésie de ce poète et neurochirurgien. Avec ses lettres qui atteignent l’âme et nous font sentir et de penser.
- Desprendimientos por: Christian Lange 6.99€Añadir al carrito
«Desprendimientos» reúne siete textos teatrales: «Inolvidable», «La última pieza», «Tercero excluido», «Umbral», «Desprendimientos», «Atado al cuello» y «Humedales». Aunque, como todo texto, poseen voluntad de autonomía y son –en sí mismos- universos personales, también es cierto que contienen hipótesis de representación que piden ser descubiertas. Estos textos han sido escritos para la escena. La dramaturgia es una escritura que está destinada a cuerpos, espacio y luz. Del mismo modo, este e-book es una muestra de literatura dramática, palabras que son imágenes, estados y acciones que se pretenden autosuficientes, pero que buscan incansablemente a quienes sean capaces de transmutarlas en ceremonia teatral compartida. Estos textos están dedicados, de manera muy especial, a todas aquellas personas que se dedican, desde todos los roles imaginables, a hacer que el teatro suceda. Ojalá que la lectura de estos materiales dispare procesos creativos en quien los lea y que consumen así su destino: habitar en cuerpos, desplegarse en el espacio, iluminarse con la mirada de los demás.
Aún no hay comentarios.